SE ACABO EL DEBATE
Un periodista brasileño setentero, cuyo nombre no recuerdo, decía, para argumentar lo inverosímil: “son mis herramientas las palabras, sin embargo, con Pelé ya no me sirven”.
Así, uno, que de aquel cronista no tengo ni las muelas, se ha sentido para describir lo que, cuatro décadas después, un rosarino al que le llaman Lio hace y sin intermitencias, confieso.
A ese respecto lanzó, diez años atrás, el fallecido DT Alejandro Sabela: “para catalogarlo ( a Messi) habría que pedir a la Real Academia de La Lengua que invente un nuevo término pues ya ninguno cabe”
O de pronto, seguimos hurgando, y podríamos responder, por fin, lo que el gran Maradona le preguntó al documentalista serbio, Kusturica: “¿Sabes que jugador hubiese sido si no caía en el consumo de cocaína?”
Pues Messi Cuccittini ya cerró el círculo, tras alzar esos seis kilos y 170 gramos de oro, el último domingo, el saldo que le quedaba. De las dudas necias también, de los cuestionamientos insensatos, de los señalamientos infames o fanáticos que exigían tomará posesión del ídolo de Villa Fiorito o sacará mayores ventajas con el "Bicho". Hoy, menos intenso pero más elegante, menos correlón pero más rebelde, menos aparecido pero más influyente en el juego, se ha reconciliado con los suyos. El debate ha terminado. Y la Pulga de los siete balones de oro ha ganado su sillón al lado del negro brasileño – el rey de reyes, quizás-, del Pelusa, de Cruyff y de Distefano.
Empero, hubiera querido que sea en otro mundial, la verdad. No en este tan manchado por razones que ya sobran detallar.
Aunque, a lo mejor repite el plato el 2026. Pues, otra cosa que no dudo es que dejará la selección cuando él lo quiera. Y ora, es temprano, todavía, gracias al hacedor.
o.rivasplata@pucp.edu.pe